Cuidar los dientes de tu perro es fundamental para evitar enfermedades. La mayoría de los perros se somete a exámenes dentales profesionales a partir de los dos años de edad. Dependiendo de la velocidad de acumulación de sarro en sus dientes, tu perro requerirá limpiezas dentales más o menos frecuentes.
Es importante seguir un buen programa de cuidados dentales caseros para reducir la frecuencia de limpiezas dentales profesionales. ¿Cuáles son las pautas para mantener una correcta salud bucal de mi perro? Aquí te lo contamos.
Tabla de contenidos
Cómo cuidar los dientes de mi perro
Siguiendo unas pautas básicas de cuidado bucal, podrás evitar casi completamente las enfermedades dentales de tu perro:
- Los piensos secos son mejores para el consumo diario, ya que son abrasivos y mantienen limpios los dientes. Es conveniente que des de comer a tu perro sólo una o dos veces al día. Si tu perro consume comida de lata, ofrécele también galletas secas para perros. Ten en cuenta que las comidas húmedas son más propensas a la acumulación de sarro y mal aliento y producen diarrea, por lo que es mejor reservarlas para algunas ocasiones y utilizar piensos secos en la dieta habitual.
- Existen piensos específicos para prevenir las enfermedades periodontales. Están pensados para perros adultos y ayudan a combatir la halitosis y la placa dental.
- Cepilla los dientes y encías de tu perro al menos tres veces por semana (con un buen cepillo de dientes para perros). Ten en cuenta que los perros de raza pequeña y los braquicéfalos necesitan cepillados más frecuentes, ya que tienden a acumular sarro y son propensos a la enfermedades periodontales.
- Es conveniente empezar a limpiar los dientes del perro cuanto antes. Si comienzas cuando es cachorro, aunque aún tienen la boca sana, el perro se acostumbrará rápidamente al proceso y cuando sea adulto, te será más fácil proceder a la limpieza diaria.
- Utiliza una pasta dentífrica específica para perros. Comienza a cepillar los dientes de tu perro cuando es un cachorro y su dentadura aún está sana. Si tu perro desarrolla una enfermedad periodontal, tendrás que cepillarle los dientes a diario.
- Ten cuidado con los juguetes que das a tu perro. Utiliza siempre productos diseñados para ellos, para evitar que mellen, rompan o desgasten sus dientes en exceso. Por ejemplo, las pelotas de tenis, que mucha gente utiliza para jugar con los perros, les destrozan los dientes.
- No des huesos de pollo o ave a tu perro, ni huesos largos, porque se astillan y pueden provocar problemas serios a tu perro. Si tienes dudas, consulta con tu veterinario para que te recomiende los productos más adecuados para tu perro.
- No dejes de visitar periódicamente a tu veterinario para que pueda observar su boca y realizarle una limpieza en caso de necesidad.
¿Puedo utilizar mi pasta de dientes para mi perro? Alternativas para limpiar los dientes de mi perro
Rotundamente, no. Los dentífricos que nosotros utilizamos, tienen flúor, el cual es tóxico para los perros. Existen dentífricos formulados específicamente para ellos, por lo que lo mejor es que elijas uno que sea especial para perros o que la fabriques una casera en tu casa.
En el mercado encontrarás diversas pastas dentífricas para perros. Son comestibles, por lo que no provocarán problemas a tu perro si las ingiere. Algunas contienen abrasivos, generalmente calcio y silicatos. Otras utilizan agentes oxigenantes que impiden la proliferación de bacterias anaerobias. Algunas llevan clorhexidina, que se un agente antibacteriano y antiviral. O ascorbato de zinc, para las enfermedades gingivales. Consulta a tu veterinario para escoger la pasta más adecuada para tu perro.
El cepillado con pasta dentífrica es muy adecuado para eliminar el sarro. Al principio, puedes limpiarle los dientes con un dedo envuelto en una gasa sobre la que aplicarás el dentífrico, o bien utilizar un guante de dedo para perros, que consiste en una pequeña funda que te colocarás en el dedo. De esta manera, llegarás fácilmente a todos los rincones. El resultado es similar al obtenido con el cepillo y permite el uso de dentífrico.
También existen enjuagues bucales específicos para perros. Son productos antisépticos que combaten el sarro, la placa y el mal aliento
Los juguetes dentales para perros también son una buena opción para limpiar sus dientes, sobre todo si se combinan con un dentífrico específico para ellos. Uno de los más conocidos es Bristly, ya que está especialmente diseñado para la limpieza dental. Este juguete dispone de unas cerdas similares a las de los cepillos y guantes de dedos, con una cavidad en la parte superior para añadir la pasta de dientes. El perro lo utilizará como mordedor (incluso hay muy buenos juguetes para perros mordedores), limpiándose los dientes mientras se entretiene.
Las pelotas dentales están diseñadas para limpiar los dientes y las encías de tu perro mientras juega. Algunas, contienen un producto mentolado que ayuda a mantener el aliento fresco.
Los snacks dentales son buenos para eliminar restos de comida que hayan quedado entre los dientes, pero no son tan efectivos como un cepillado. Utilízalos como premio y como complemento al cepillado, pero no como sustituto al mismo.
Los huesos dentales permiten mantener la higiene dental del perro. Además, tu perro estará encantado royendo estos huesos. Utiliza productos diseñados para ellos y específicos para el cuidado bucal. En el mercado encontrarás diferentes opciones, desde huesos hechos con cuero hasta astas de ciervo. Consulta con tu veterinario sobre la alternativa más conveniente para tu perro.
Si tu perro tiene una enfermedad periodontal o gingivitis, tu veterinario tendrá que realizarle una limpieza bucal en la clínica. El tratamiento es sencillo, pero requiere anestesia general.
Cómo preparar un dentífrico casero
Existen multitud de recetas para preparar un dentífrico casero para tu perro, que sea natural, económico y no dañino para tu compañero. La más habitual se elabora con bicarbonato.
Para hacerla, mezcla una cucharada de bicarbonato sódico con una cucharada de agua hasta lograr una pasta homogénea. El bicarbonato previene el mal aliento, limpia y blanquea el esmalte. Si le añades alguna hierba aromática que no sea dañina para tu perro, como la menta, ayudarás a combatir el mal aliento.
Enfermedades periodontales en los perros. Gingivitis, sarro y periodontitis.
Las enfermedades periodontales son muy habituales en los perros. Inicialmente, se forma sarro, el cual puede provocar una gingivitis, que es una inflamación reversible de las encías. Si la gingivitis avanza, puede ocasionar la periodontitis, inflamación de las estructuras más profundas en que se alojan los dientes.
El tratamiento consiste en evitar el progreso de la gingivitis y retrasar el progreso de la periodontitis en caso de haberse producido. Por ello es muy importante realizar un chequeo anual de la boca de nuestro perro.
La gingivitis es el primer paso en las enfermedades periodontales de tu perro. En la gingivitis, el sarro se acumula produciendo puntos en los que la encía se separa de los dientes, lo cual crea pequeñas bolsas donde se acumulan las bacterias y restos de alimento. Si no lo limpiamos, las bacterias continúan alimentándose y reproduciéndose, llegando a provocar una inflamación de las encías que denominamos gingivitis.
El sarro está compuesto de sales de calcio, restos de alimentos, bacterias y otros materiales orgánicos. Cuando comienza a depositarse, es blando y amarillento. En esta primera etapa, se conoce como placa dental. Con el tiempo, la placa se endurece y se forma el sarro, que se acumula en las superficies dentales, especialmente en el lado externo (por el carrillo), en los premolares y molares superiores.
Esta acumulación provoca la inflamación de las encías. Algunas razas, como los Caniches y perros de raza pequeña, así como los braquicéfalos y los perros mayores de 5 años, acumulan el sarro con más facilidad.
Se ha observado que los perros que consumen pienso seco y mastican huesos o galletas específicos para perros, acumulan menos sarro que los que consumen alimento de lata.
La gingivitis produce halitosis (mal aliento). Las encías aparecen inflamadas y pueden sangrar. Si la gingivitis avanza, se produce la periodontitis. Cuando la gingivitis ataca el cemento y la membrana periodontal, las raíces del diente se infectan, el diente cede y acaba por caer. El proceso es doloroso. Puedes observar que, aunque el perro parezca tener hambre, coma de mala gana e hipersalive.
Para eliminar todo el sarro y la placa dental, tu veterinario tiene que proceder a realizar una limpieza bucal completa. Es necesaria anestesia general. En casos de periodontitis avanzada, puede ser necesario extraer los dientes del perro. Seguramente le administrarán antibióticos y tu veterinario te recomendará una serie de cuidados a realizar en casa.
Conclusiones
- El cuidado de los dientes de tu perro es fundamental para prevenir enfermedades.
- Los piensos secos son más adecuados para la dieta habitual de tu perro.
- Siguiendo una serie de pautas básicas, lograrás mantener una buena higiene bucal para tu perro.
- No utilices nunca un dentífrico para humanos, ya que es tóxico para los perros.
- En el mercado existen multitud de productos para mantener la boca de tu perro limpia.
- Puedes preparar un buen dentífrico casero con bicarbonato y agua.
- Las enfermedades periodontales son habituales en los perros.
- Un chequeo periódico es fundamental para cuidar la boca de tu perro.
- Consulta a tu veterinario cualquier duda que pueda surgirte.
HACE POCO ME MORDIO MI PERRO LE QUITE ALGO QUE TENIA EN LA BOCA ETA UNA BOLSA DE PAPEL Y LE HIBA A DAR EN LA CABEZA Y ME SALTO . Y LUEGO LE DIJE MIRA LO QUE HAZ HECHO .SE AGACHO SU CABEZA. QUERIA QUE LE DIERA MAS COMIDA.
Te mordió seguramente por tu mala ortografía
Me ayudó mucho los consejos. Gracias.
Acostumbré a mi boxer desde chico y uso pasta infantil, me lo recomendó el veterinario, le encanta la de fresa, el problema es que se emociona mordisqueando y se carga los cepillos, verlo es todo un espectáculo!
Tiene ya 3 años y su sonrisa se ve como de Hollywood 😉