Todo sobre el Bullmastiff: cría, cuidado y adiestramiento

Como todos los perros molosos, el Bullmastiff es un excelente guardián, valiente y poderoso. Es muy cariñoso con su familia, pero se muestra distante con los extraños. Es un perro muy equilibrado, que no suele mostrarse agresivo, pero si algo le pone en estado de alerta, es difícil que se eche atrás.

Con él, podrás vivir grandes aventuras, para luego regresar a casa y tumbarte a su lado en el sofá. Se trata de un perro muy leal a los suyos, territorial y con instinto protector. Le gusta participar en la vida de la familia.

Debido a la forma de su mandíbula y cabeza, tiene tendencia a roncar y babear, pero seguro que se gana rápidamente tu cariño.

Si ya has tenido perros con carácter y sabes mantener el liderazgo, podrás disfrutar mucho con la compañía de este excelente amigo. Pero si te dejas dominar o no tienes tiempo para dedicarle, es mejor que busques otra raza. No es una raza para dueños primerizos, ya que es difícil de entrenar.

La historia del Bullmastiff

El Bullmastiff se desarrolló hacia 1860, a través del cruce de mastines y bulldogs, porque los guardabosques ingleses que comenzaron a trabajar la raza buscaban un perro más grande que el Bulldog y más pequeño que el Mastín, pero con las buenas características de ambos.

En aquella época, la caza furtiva era un gran problema y los guardabosques buscaban un perro grande, tranquilo y valiente, que fuera suficientemente rápido para rastrear a los cazadores furtivos y atraparlos y suficientemente fuerte para retenerlos, pero sin hacerles daño.

El Mastín era un perro grande, pero demasiado lento, mientras que el Bulldog era por entonces demasiado agresivo y cuando atrapaba a los furtivos, era capaz de hacerles mucho daño. El cruce dio lugar al Bullmastiff, conocido como “el perro nocturno del guardabosques”, porque trabajaba y vivía con ellos.

El perro se criaba por su utilidad y temperamento, sin pensar en el aspecto, y se prefería el pelaje atigrado oscuro, porque así se camuflaban perfectamente por la noche.

Cuando la caza furtiva disminuyó, el Bullmastiff ganó popularidad como perro guardián. No se le consideró una raza diferente hasta principios del siglo XX. El Kennel Club de Inglaterra la reconoció en 194 y el American Kennel Club en 1933.

Características principales del Bullmastiff

  • El Bullmastiff es un perro moloso de tamaño grande, pero no gigante.
  • Puede medir entre 61 y 69 centímetros (altura a la cruz). Su peso mínimo es de 45 a 59 kilos o más y su esperanza de vida media oscila entre 8 y 10 años..
  • Es muy valiente, fuerte y rápido. Su imponente aspecto es suficiente para intimidar a los intrusos y además, no tiene miedo a nada y no duda en proteger a los suyos.
  • Es un perro equilibrado y tranquilo, pero cuando se excita muestra una férrea voluntad.
  • Es un perro limpio, que no muda en exceso, pero con tendencia a babear y a expeler gases (algo que, sin embargo, puedes mantener a raya con una dieta sana y evitando piensos a base de legumbres, que son menos digestivas para los perros.)
  • Necesita ejercicio físico, pero no demasiado intenso. Le basta con un par de paseos y tiempo de juego para satisfacer sus necesidades.
  • No suele ladrar, porque fue desarrollado para ser un perro guardián silencioso, pero no dudará en defender a los suyos si lo considera necesario.

Se lleva muy bien con los niños y es muy paciente con ellos, pero dado su tamaño, tendrás que tener cuidado.

  • Puede pasar tiempo solo, pero le gusta estar en compañía de los suyos y participar en las actividades familiares. Las cámaras de vigilancia con micrófono o los comederos con videoconferencia le pueden ayudar a sobrellevar la soledad durante el tiempo que estás fuera.
  • Si se aburre, puede desarrollar comportamientos destructivos.
  • Dada su naturaleza braquicefálica, sufre problemas respiratorios.
  • No es un perro que se meta en peleas, pero si se inicia una, es bastante probable que sea él quien la finalice.
  • Se trata de un perro inteligente, pero también es muy testarudo y tiende a tomar sus propias decisiones. Por eso, no es un perro que destaque en obediencia y necesita un dueño experimentado y que sepa establecer el liderazgo.
  • El Bullmastiff tiende a roncar y emitir sibilancias y jadeos. Puede tener problemas de respiración, debido a su naturaleza braquicéfala.
  • No suelen tolerar a otros perros del mismo sexo, y a veces tampoco a los del sexo opuesto.
  • Con otros animales puede ser agresivo, llegando a herirlos gravemente o incluso matarlos.
  • Es sensible al calor, debido a sus dificultades respiratorias. Si vives en zonas de calor y está mucho tiempo al aire trata de comprarle un toldo donde pueda resguardarse del sol, así como una piscina para perros grandes, donde tenga la posibilidad de refrescarse.
  • Tiene un umbral de dolor elevado, por lo que puede ser difícil saber si está herido.

¿Cuál es el estándar de la raza?

El estándar de una raza es el conjunto de directrices que describe las características, temperamento y apariencia de una raza. Los criadores deben seguirlas en todo momento para evitar condiciones que perjudiquen la salud, bienestar o solidez de la raza.

Hemos tomado como referencia el documento del American Kennel Club (AKC) para recordar algunas de las características principales del Bullmastiff. Aquí te ofrecemos un resumen de las normas, pero si necesitas información más detallada, puedes acudir directamente a esta referencia.

  • Aspecto general. El Bullmastiff es un perro simétrico, de aspecto fuerte y resistente y con expresión alerta. Constitución poderosa. La cría base es 60% Mastín y 40% Bulldog.
  • Tamaño y proporciones. La altura a la cruz del macho está entre 63 y 69 centímetros y la de la hembra entre 61 y 66 centímetros. El peso del macho oscila entre 50 y 59 kilos y el de la hembra entre 45 y 54 kilos. En igualdad de condiciones, se favorece al perro más sustancial. En cuanto a la proporción, la longitud desde la punta del esternón a la parte posterior del muslo excede la altura a la cruz, pero muy ligeramente. La apariencia es casi cuadrada.

Temperamento. Intrépido y confiado, pero dócil. Combina la fiabilidad, inteligencia y voluntad de complacer que se requiere en un compañero familiar leal y protector.

  • Cabeza. Grande y ancha. Surcada por arrugas simétricas. Mejillas bien desarrolladas y frente plana. Stop moderado.
  • Ojos. Oscuros y de tamaño mediano. Expresión aguda, alerta e inteligente.
  • Orejas. En forma de V. Llevadas cerca de las mejillas, de color más oscuro que el cuerpo. Tamaño mediano.
  • Hocico. Amplio y profundo, oscuro, con una longitud en relación a la cabeza de 1 a 3. La falta de frente, con las fosas nasales en la parte superior del hocico, es una reversión al Bulldog y es indeseable. Nariz negra, con fosas nasales grandes y anchas.
  • Boca. Fauces moderadamente colgantes, no demasiado. Mordida nivelada o ligeramente inferior. Dientes grandes y bien separados.
  • Cuello. Ligeramente arqueado, de longitud moderada, muy musculoso y de circunferencia casi igual a la del cráneo.
  • Cuerpo. Compacto. Línea superior recta y nivelada entre la cruz y el lomo. Pecho ancho y profundo, costillas bien arqueadas y bien colocadas entre los miembros anteriores. Espalda corta, bien equilibrada. Lomo ancho y musculoso, ligeramente arqueado, con buena profundidad de flancos.
  • Patas delanteras. Hombros musculosos, pero no cargados, ligeramente inclinados. Patas rectas y bien separadas. Los codos no están girados hacia adentro ni hacia afuera.
  • Patas traseras. Anchas y musculosas. Segundo muslo bien desarrollado, angulación moderada en corvejones. Corvejones y pies separados son defectos graves.
  • Pies. Los pies delanteros son de tamaño medio, con metacarpos rectos y dedos redondos y bien arqueados. Almohadillas gruesas y resistentes. Uñas negras.
  • Cola. Inserción alta, fuerte en la raíz, estrechándose hasta el corvejón. Puede ser recta o curvada.

Marcha o movimiento. Libre y flexible, ágil. El alcance y el impulso indican que el perro aprovecha al máximo su angulación moderada. La espalda permanece nivelada y firme. El perro se mueve en línea recta. Los pies tienden a converger bajo el cuerpo, sin cruzarse, a medida que aumenta la velocidad. No hay torsión de las articulaciones.

  • Pelaje. Corto y denso, protege de las inclemencias del tiempo.
  • Color. Rojo, leonado o atigrado. A excepción de una pequeña mancha blanca en el pecho, el resto de marcas blancas se consideran una falta.
  • Faltas. Cualquier desviación des standard será considerado como falta y su gravedad dependerá del grado de desviación y de sus consecuencias sobre la salud y el bienestar del perro. Una desviación extrema puede conllevar la eliminación del perro en la competición.

¿El Bullmastiff es un perro inteligente?

Inteligencia funcional (obediencia)

El Bullmastiff se considera una de las razas con inteligencia funcional y de obediencia mínima. La medida de inteligencia funcional de los perros se basa en la clasificación establecida por el neuropsicólogo Stanley Coren, muy conocido por sus estudios sobre el comportamiento canino y su vínculo con el ser humano.

Según esta clasificación, el Bullmastiff es un perro que necesita entre 40 y 80 repeticiones para dar muestras de que ha entendido la orden, mejorando con la práctica.

Es posible que no comience a mostrar comprensión hasta llevar unas 25 repeticiones. Necesita muchas repeticiones para mostrarse aceptablemente receptivo y responden a la primera un 30% de las veces o más.

Parece distraído la mayor parte del tiempo y solo responde cuando le apetece. Si hay distancia entre el dueño y él, no habrá respuesta. Se necesita un adiestrador experimentado y paciente.

Debes tener en cuenta que esto se refiere únicamente a la inteligencia funcional, que se refiere al grado de obediencia de perro. En esta inteligencia influyen tanto la capacidad de aprendizaje como su disposición para acatar las órdenes.

Pero la inteligencia es multifuncional y el Bullmastiff también destaca ampliamente en otros campos.

Inteligencia adaptativa e instintiva

Es decir, es posible que un perro con elevada inteligencia adaptativa (que es la capacidad del perro para aprender de las situaciones que se le presentan y resolver problemas por sí mismo) presente una inteligencia funcional baja, porque se trata de una raza que tiende a tomar sus propias decisiones y no es amigo de obedecer órdenes. La inteligencia instintiva se refiere a las habilidades especiales para las que ha sido desarrollada la raza.

En este sentido, el Bullmastiff es un perro desarrollado para rastrear y retener a cazadores furtivos, por lo que desempeña las labores de guardia de manera silenciosa y con gran eficacia. Además se trata de un perro muy leal y protector de los suyos. Cuando comprende su lugar en la jerarquía, es entrenable y le gusta complacer.

¿Cuáles son los problemas de salud más frecuentes en el Bullmastiff?

El Bullmastiff es un perro sano, pero al igual que otras razas, presenta propensión a sufrir ciertos problemas de salud. Aunque no todos padecerán alguna o todas estas enfermedades, es importante conocerlas si estás considerando tener uno. Las más frecuentes son las siguientes:

Displasia de cadera

Enfermedad degenerativa en la que el fémur no encaja bien en la cavidad pélvica de la articulación de la cadera. Puede afectar a ambos lados y sus síntomas no siempre son apreciables, aunque algunos perros sufren dolor y cojera, que puede degenerar en artritis con la edad. Es hereditaria, pero puede empeorar a causa de otros factores, como un crecimiento demasiado rápido del perro o lesiones producidas por saltos o caídas.

Displasia de codo

Se trata de una enfermedad hereditaria común en los perros de raza grande. Se cree que está causada por los diferentes ritmos de crecimiento de los tres huesos que componen el codo del perro, lo que provoca una laxitud articular. Esto puede provocar una dolorosa cojera. Dependiendo de la gravedad del problema, el veterinario puede recomendar una intervención quirúrgica, el control del peso o la medicación para controlar el dolor.

Hipotiroidismo

Deficiente producción de la hormona tiroidea, lo que puede producir infertilidad, obesidad, torpeza mental y falta de energía. El pelo del perro se vuelve áspero y quebradizo y la piel dura y oscura. Se trata con medicación.

Ruptura del ligamento cruzado

Torsión de la pata trasera del perro, haciendo que el ligamento cruzado anterior se desgarre o se rompa, con la consiguiente cojera. Puede derivar en artritis y si el ligamento está completamente roto, requiere cirugía.

Panosteitis

También conocida como enostosis, es un trastorno frecuente en razas de crecimiento rápido. La causa se desconoce. Cursa con dolor y cojera, que obliga al perro a cambiar de una pata a otra, por lo que también ha recibido el nombre de cojera cíclica. Suele desaparecer a los 20 meses de edad.

Torsión y Dilatación gástrica

Afecta a perros grandes y de pecho profundo. Se produce cuando el estómago se dilata con gas o aire y luego se retuerce (torsión gástrica). El perro es incapaz de eructar o vomitar, por lo que no logra librarse del exceso de aire en el estómago, y se impide el retorno normal de la sangre al corazón. La presión sanguínea disminuye y el perro entra en shock. Se trata de una afección grave que requiere atención veterinaria inmediata. Si tu perro tiene el abdomen distendido, saliva excesivamente, tiene arcadas y no vomita, está inquieto, deprimido, letárgico o débil, con una frecuencia cardíaca rápida, llévalo al veterinario lo antes posible.

Estenosis aórtica

Obstrucción parcial del flujo sanguíneo al salir del corazón, lo que significa que el corazón debe trabajar más para bombear suficiente sangre. En casos graves, el perro puede desmayarse o quedar sin energía durante el ejercicio. También puede tener dificultades para respirar, toser o no crecer tanto como debería. Acude al veterinario si observas estos síntomas.

Entropión

El párpado se enrolla hacia adentro, provocando irritaciones y lesionando el globo ocular. Puede afectar a uno o a ambos ojos. Requiere intervención quirúrgica.

Cistinuria

Incapacidad de reabsorber la cistina (un aminoácido), dando lugar a la formación de cálculos en el riñón o en la vejiga.

Osteosarcoma

Tumor óseo que suele afectar a razas grandes y gigantes de mediana edad. Los primeros síntomas son la cojera y el dolor en las patas. La detección temprana es importante, ya que cuanto antes se extirpe, mejor pronóstico tiene.

También puede desarrollar otros tipos de cáncer, como el linfosarcoma, el hemangiosarcoma o los tumores de mastocitos.

Problemas dermatológicos

La piel del Bullmastiff es sensible y propensa a erupciones, llagas e irritaciones. También es propenso a alergias de contacto o inhalantes.

¿Mi Bullmastiff necesita cuidados especiales?

  • Ejercicio físico. Necesita realizar ejercicio físico moderado. Bastará con un par de salidas diarias y algo de tiempo dedicado al juego y entrenamiento. Si puede disponer de un patio o finca, es conveniente que esté vallado, para que no amplíe su territorio e impida el paso de otras personas o animales.
  • Problemas respiratorios y sensibilidad al calor. Se trata de un perro braquicéfalo, por lo que es propenso a sufrir insolación y golpes de calor. Asimismo, tiene problemas respiratorios, por lo que jadea, ronca y hace ruidos nasales.
  • Alimentación. Alimenta a tu Bullmastiff con comida de alta calidad adecuada a sus características. Evita el sobrepeso, ya que ocasionará problemas de salud a tu perro. Asimismo, procura alimentarlo con raciones pequeñas varias veces al día para minimizar el riesgo de torsión gástrica, ya que se trata de una afección muy peligrosa y potencialmente mortal. Es importante también que disponga de agua fresca y limpia. Ten en cuenta que, debido a la forma de sus labios, salpicará agua por todas partes al beber.
  • Cuidado de su pelo. El Bullmastiff tiene el pelo corto y es fácil de cuidar. Para mantenerlo sano y brillante y eliminar los pelos muertos, es conveniente que le cepilles semanalmente. No tendrás que bañarlo con frecuencia, a no ser que se ensucie. Un cepillo de cerdas cortas es perfecto para su melena.
  • Uñas. Si no se desgastan por sí mismas, tendrás que cortárselas una o dos veces al mes. Pregunta a tu veterinario cómo hacerlo o pídele que se las corte él. Acostúmbrale desde pequeño, ya que es posible que no se sienta cómodo cuando le tocan las patas.
  • Higiene dental. Tiene tendencia a sufrir mal aliento, por lo que tendrás que cepillarle los dientes al menos una vez a la semana, o tal vez con mayor frecuencia, para evitar la acumulación de gérmenes.
  • Comprueba el estado de salud de tu Bullmastiff. Comprueba las patas de tu Bullmastiff con frecuencia y mira dentro de su boca y orejas. Si observas algún indicio de problema en general, como llagas, sarpullidos, enrojecimiento o sensibilidad de la piel, inflamaciones, problemas en la nariz, boca y ojos, etc., acude a tu veterinario. Los ojos del Bullmastiff deben estar claros, sin enrojecimientos ni secreciones. Asimismo, los oídos deben oler bien y no presentar demasiada cera o suciedad.

¿Cómo se lleva el Bullmastiff con los niños y con otros animales?

El Bullmastiff se lleva muy bien con los niños y es extremadamente paciente con ellos. Sin embargo, es importante que supervises sus interacciones, ya que se trata de un perro grande y robusto, que podría causar lesiones a los pequeños.

Sin embargo, podrías tener problemas con los amigos de tus hijos, ya que esta raza no se lleva bien con los extraños.

Si tu hijo quiere un perro, es importante que le enseñes cómo tiene que comportarse con los él. Explícale que no debe correr ni gritar en presencia del perro, pues este podría excitarse y perseguirle.

Antes de morder, los perros suelen mostrar su molestia con algún tipo de advertencia, por eso es muy importante que los niños aprendan a interpretar correctamente sus señales. Los niños no deberían acercarse al perro mientras está comiendo o durmiendo y mucho menos quitarle la comida. Sobre todo, si no pertenecen a la familia. Pero no debes fiarte, porque este tipo de raza ha sido desarrollada para atacar de manera silenciosa, por lo que si considera que tiene que proteger a los suyos o defenderse, es posible que no avise primero.

Con otros perros y animales, no se muestra especialmente amistoso. No suele tolerar bien a otros perros del mismo sexo y a veces tampoco a los del sexo contrario. El Bullmastiff tiene un alto instinto de presa, que puede llevarlo a atacar a otros perros y gatos. Aunque puede llegar a tolerarlos por medio de la socialización, es mejor que sea el único animal de la casa y que tengas mucho cuidado cuando lo saques a pasear. Debes llevarlo siempre atado, para evitar que se lance a la persecución de alguna presa potencial.

La cría de la raza Bullmastiff

Si quieres adoptar un Bullmastiff

Si has decidido adoptar un Bullmastiff, estarás dando una nueva oportunidad a un perro que necesita un hogar y una familia, cuidados y cariño. Siempre se trata de una buena opción para proporcionar a un perro abandonado una nueva vida, feliz y con gente que le quiera. No obstante, debes tener en cuenta las características de la raza y asegurarte de que se trata del perro adecuado para ti.

Si quieres comprar un Bullmastiff

Si quieres comprar uno, te recomendamos no acudir a una tienda de mascotas y buscar un criador profesional y responsable. Estos criadores se preocupan por mantener el buen estado de la raza y te garantizan el perro ha pasado todas las revisiones necesarias, además de estar en perfectas condiciones sanitarias. También debe proporcionarte la documentación que muestra que sus padres han sido autorizados para la cría, con el fin de prevenir los problemas genéticos asociados a esta raza.

No dudes en informarte acerca del temperamento del perro, su estado de salud y los problemas que puede sufrir. Un criador profesional podrá orientarte y aconsejarte acerca de si se trata del perro adecuado para ti.

Investiga previamente sobre la raza, para tener información acerca de sus características, revisa las instalaciones del criador y verifica que los animales no se encuentran en condiciones insalubres y desconfía de quién no quiera responder a tus preguntas.

Tu veterinario también puede remitirte a un criador de confianza donde adquirir un cachorro sano.

¿Vas a dedicarte a la cría del Bullmastiff?

Si deseas dedicarte a la cría del Bullmastiff, es recomendable que sigas unas pautas que son generales a la cría de cualquier perro. Lo primero que debes hacer es ponerte en contacto con asociaciones dedicadas a esta raza y aprender a realizar una cría responsable, asegurándote de que los perros están libres de defectos congénitos y otros problemas.

Consulta a los expertos para elegir buenos perros y poder garantizar camadas sanas, ayudando a mantener las características de la raza y eliminando sus defectos. También tendrás que asegurarte de que tus compradores serán propietarios responsables y cuidadosos.

Cómo son las camadas

La camada media oscila entre 5 y 12 cachorros. Aunque 10 cachorros es poco frecuente, es probable que las camadas sean grandes, con una media de 8 cachorros. Tendrás que asegurarles un espacio adecuado, con la comodidad y recursos que necesitan.

En caso de que su madre no los pueda amamantar, en el mercado existen leches especializadas para los cachorros y comida de continuación para cachorros entre 1 y 3 meses que les ofrecerá un buen comienzo en la vida.

Problemas en el parto (distocia)

Al igual que otros braquicéfalos, tiene dificultades en los partos naturales y es frecuente que nazcan por cesárea. Esto se debe a que la cabeza o el cuerpo del cachorro pueden ser demasiado grandes para las estrechas caderas de la madre.

También hay una elevada incidencia de cachorros nacidos muertos, por lo que es importante que permanezcas en contacto constante con tu veterinario.

Precio de un cachorro Bullmastiff

Si lo compras en España, el precio de un Bullmastiff oscila entre 300 y 1300 €. El precio medio ronda los 500€.

Conclusiones

  • Es equilibrado y poco agresivo, desarrollado para retener a los cazadores furtivos.
  • Posee un fuerte instinto protector y es muy leal a los suyos.
  • No suele ladrar, es un vigilante silencioso.
  • Posee un fuerte instinto de presa y no se lleva bien con otros animales.
  • Necesita un dueño experimentado que sepa establecer el liderazgo. No es adecuado par dueños tímidos o primerizos.
  • Es muy paciente con los niños, pero debes tener cuidado, dado su gran tamaño. No tolera bien a otros perros y puede otros animales son una presa potencial.
  • Su inteligencia funcional (obediencia a las órdenes) es muy baja, ya que toma sus propias decisiones y no responde bien a las órdenes.
  • Es muy rápido y ágil, más de lo que esperarías para un perro de su tamaño.
  • Es sensible al calor y tiene problemas respiratorios
  • Tiene tendencia a babear y a expeler gases
  • Si vas a criar esta raza, ponte en contacto con las asociaciones pertinentes y asegúrate de hacerlo de manera responsable

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