Los gases en los perros, también conocidos como flatulencias, pueden ser un problema común y desagradable, sobre todo cuando se producen en exceso. Además, es posible que estos gases sean molestos para tu perro y afecten a su calidad de vida, o que sean síntoma de una enfermedad subyacente que es necesario tratar. Por ello, resulta esencial conocer las causas y saber cómo prevenirlos, aliviarlos y eliminarlos.
Hay varios factores que pueden contribuir a la producción de gases en los perros, como la dieta, las afecciones médicas y la ingestión de aire. Comprender cuáles son las causas es crucial para determinar la mejor manera de aliviar y eliminar el problema.
Además, es importante diferenciar entre la producción normal y excesiva de gases en los perros. Mientras que una cierta incidencia de flatulencia es normal, el exceso de gas puede requerir atención veterinaria inmediata.
En este artículo, profundizaremos en las distintas causas de los gases en los perros y en las diversas formas de prevenirlos, aliviarlos y eliminarlos. También exploraremos los diferentes cambios dietéticos y rutinas de ejercicio que pueden ayudar a promover una digestión saludable y reducir la producción de gases, sin olvidar la recomendación de acudir al veterinario para establecer un diagnóstico correcto.
Tabla de contenidos
¿Qué son las flatulencias y cómo afectan a mi perro?
La flatulencia en los perros se produce cuando se acumula un exceso de gas en su sistema digestivo. Esto puede suceder por varias razones, incluyendo cambios en la dieta o el consumo de alimentos que su cuerpo no puede digerir correctamente. Los alimentos ricos en grasas, la soja, los guisantes y los lácteos son culpables habituales de la flatulencia crónica en los perros.
Aunque la producción ocasional de gases es normal, la flatulencia excesiva puede causar malestar tanto al perro como a su dueño.
Si las flatulencias o gases de tu perro se vuelven insoportables o demasiado frecuentes, puede que sea el momento de investigar la causa y realizar los cambios necesarios.
En algunos casos, un simple ajuste dietético puede ayudar a aliviar el problema. Si tu perro está consumiendo un nuevo tipo de alimento o si ha cambiado su dieta recientemente, éste podría ser el origen del problema. Volver a su dieta original o introducir nuevos alimentos gradualmente puede ayudar a reducir la producción de gases en su sistema digestivo.
También es importante que tengas en cuenta los tipos de alimentos que proporcionas a tu perro. Algunos pueden ser difíciles de digerir para él, provocando una producción excesiva de gases.
¿Cuáles son las causas más frecuentes de flatulencia en los perros?
Existen varios factores que pueden contribuir a la producción de gases en los perros. Algunas de las causas más comunes son:
La dieta
La dieta de un perro puede desempeñar un papel importante en la producción de gases. Por lo tanto, es importante que prestes atención a los alimentos que consume tu perro.
La causa más común de flatulencia es un cambio en la dieta o que el perro coma algo en mal estado, lo que se conoce como indiscreción alimentaria. Se trata de alimentos poco digeribles, que fermentan excesivamente en el colon, con la consiguiente formación de gases.
Ciertos alimentos, como las judías, los productos lácteos y los alimentos grasos, pueden ser difíciles de digerir para los perros y provocar una mayor producción de gases. Las alubias contienen carbohidratos complejos difíciles de digerir, mientras que los productos lácteos pueden provocar intolerancia a la lactosa en algunos perros. Los alimentos grasos también pueden ser difíciles de digerir y provocar diarrea y flatulencia.
Los cambios en la dieta o en los horarios de alimentación también pueden contribuir a la producción de gases en los perros. Cambiar bruscamente la comida del perro o darle de comer a intervalos irregulares puede alterar su sistema digestivo y provocar la producción de gases. Por eso es importante introducir gradualmente los nuevos alimentos en la dieta del perro y mantener un horario de alimentación constante.
Para prevenir la producción excesiva de gases en los perros, se recomienda alimentarlos con una dieta equilibrada y nutricionalmente completa, que satisfaga sus necesidades individuales. Busca piensos de alta calidad y consulta a tu veterinario en caso de duda.
Asimismo, evita alimentar a tu perro con sobras de tu comida, ya que algunos de los alimentos que son buenos para nosotros pueden provocar daños digestivos a tu perro, además de obesidad.
Enfermedades subyacentes
Existen diversos problemas de salud subyacentes que pueden provocar gases excesivos a tu perro, como los parásitos intestinales, la enfermedad inflamatoria intestinal y otros trastornos gastrointestinales. Estas afecciones pueden causar inflamación en el revestimiento intestinal, provocando la producción de gases y otros síntomas digestivos, como diarrea, vómitos y dolor abdominal.
Además, las alergias o intolerancias alimentarias también pueden contribuir a la producción de gases en los perros.
Al igual que los humanos, los perros pueden desarrollar una reacción alérgica o intolerancia a ciertos tipos de alimentos. Esto puede causarinflamación en los intestinos y conducir a la producción de gas, junto con otros síntomas como picor, erupciones cutáneas y diarrea.
Si sospechas que los gases de tu perro se deben a una enfermedad, consulta a tu veterinario, para que pueda realizar las pruebas pertinentes y establecer un diagnóstico y tratamiento correctos.
Tragar aire
La ingestión de aire, también conocida como aerofagia, es otra causa común de producción de gases en los perros. Los perros que comen o beben demasiado deprisa pueden tragar aire junto con la comida o el agua, lo que provoca un exceso de gases en los intestinos. Además, los perros propensos a salivar en exceso, como los que tienen problemas dentales o los que están ansiosos, también pueden tragar aire.
Cuando esto sucede, el aire entra en el estómago, distendiéndolo y causando malestar. A medida que el aire se desplaza por el aparato digestivo, puede contribuir a la producción de gases y flatulencias.
Para evitar que tu perro trague aire y reducir la producción de gases, es importante fomentar hábitos alimentarios lentos y conscientes. Esto puede conseguirse dándole comidas más pequeñas y frecuentes a lo largo del día o utilizando comederos especiales, que obliguen al perro a comer despacio. Además, asegúrate de que tu perro tiene acceso a agua potable limpia en todo momento y controla su ingesta de agua.
Si tu perro es propenso a la salivación excesiva, es importante identificar y abordar la causa subyacente. Los problemas dentales, la ansiedad y otros problemas de salud pueden contribuir al babeo excesivo y a la deglución de aire. El tratamiento del problema subyacente ayudará a reducir la cantidad de aire que traga, minimizando la producción de gas.
La raza
La raza del perro también puede influir en su propensión a la producción de gases. De hecho, las razas braquicéfalas, como el Bulldog, el Carlino o el Boxer, que tienen el hocico corto o la cara chata, son más propensas a sufrir este problema debido a a la anatomía de su aparato digestivo, que puede dificultarles la expulsión de gases o la digestión de ciertos tipos de alimentos.
Otras razas, como el Pastor Alemán o el Golden Retriever, son susceptibles a sufrir enfermedad inflamatoria intestinal, que se manifiesta a través de diversos síntomas, entre los que se incluyen las flatulencias.
Por otro lado, los perros obesos o con sobrepeso pueden ser más susceptibles a este problema. Esto se debe a que el exceso de grasa corporal puede ejercer presión sobre el sistema digestivo, provocando un aumento de la producción de gases.
Finalmente, los perros que han sido sometidos a cirugía o tratamientos médicos que afectan a su sistema digestivo también pueden presentar una propensión mayor a la producción de gases. Por ejemplo, los perros que han sido operados para extirparles parte del intestino o los que han sido tratados con antibióticos pueden experimentar cambios en su microbioma intestinal, lo que provoca un aumento de la producción de gases.
Si tu perro experimenta una producción de gases persistente o grave, es importante que consultes a tu veterinario para descartar cualquier posible problema de salud subyacente.
Síntomas más frecuentes de la flatulencia canina
Cuando se trata de identificar los problemas gastrointestinales de los perros, es importante prestar atención a los signos clínicos comunes. En el caso de las flatulencias, pueden incluir:
Expulsión de gases por el ano, que pueden o no tener olor
Molestias abdominales leves
Hinchazón
Borborigmos (ruidos en la tripa)
Heces blandas
Diarrea
Vómitos
Pérdida de peso
Es fundamental estar atento a estos síntomas y consultar al veterinario si persisten o empeoran. Un diagnóstico y un plan de tratamiento adecuados pueden ayudar a tu compañero peludo a sentirse mejor.
Diagnóstico de la flatulencia canina
El diagnóstico se realiza a partir del historial médico del perro y el análisis de los síntomas que muestra. Identificar la causa subyacente requiere descartar varios factores potenciales que pueden contribuir a la afección.
Algunos de los factores más comunes que los veterinarios deben tener en cuenta al evaluar la flatulencia en perros son:
aumento de la deglución de aire (aerofagia)
alimentación compulsiva o glotonería
enfermedades respiratorias
alimentación poco después del ejercicio
si el perro pertenece a una raza braquicefálica
indiscreción alimentaria o dietas ricas en soja, guisantes o judías, en fibras fermentables, alimentos en mal estado, leche y productos lácteos, cambios bruscos de dieta, alimentos picantes y aditivos alimentarios
enfermedad inflamatoria intestinal
sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado
tumores
síndrome del intestino irritable
parásitos intestinales
enteritis
insuficiencia pancreática exocrina
Para confirmar la presunta causa de la flatulencia, los veterinarios pueden emplear una serie de pruebas diagnósticas. Éstas pruebas suelen incluir un examen y/o cultivo fecal, citología rectal, análisis de sangre y orina, pruebas especializadas como la inmunorreactividad similar a la tripsina (TLI), la cobalamina sérica y las pruebas de folato sérico, radiografías abdominales, ecografía abdominal y biopsias intestinales.
Tratamiento de la flatulencia canina
Una vez realizado el diagnóstico, el tratamiento de la flatulencia en perros suele incluir modificaciones dietéticas y, en algunos casos, terapia médica. El curso específico del tratamiento dependerá de la causa subyacente de la flatulencia, y tu veterinario creará un plan de tratamiento personalizado para su mascota.
A menudo se recomiendan cambios en la dieta como tratamiento de primera línea para los gases caninos. Esto puede incluir el cambio a una dieta altamente digerible, que sea baja en fibra y grasa. De esta manera se minimiza la cantidad de alimentos no digeridos que llegan al colon, reduciendo así la producción de gases. El veterinario puede recomendar una dieta específica o formular una casera que se adapte a las necesidades nutricionales individuales de tu perro.
Además de los cambios dietéticos, también puede prescribirse una terapia médica para aliviar los síntomas de flatulencia. Esto puede incluir el uso de carminativos, que son medicamentos que favorecen la expulsión de los gases del tubo digestivo y favorecen un equilibrio saludable de las bacterias intestinales.
En general, el tratamiento de la flatulencia en los perros es muy individualizado y se basa en la causa subyacente de la afección.
En la mayoría de los casos no complicados de flatulencia en pacientes, los cambios en la dieta y estilo de vida suelen ser efectivos. Identificar las sustancias y productos alimentarios que causan flatulencia es crucial, y una vez que se han identificado, es importante evitarlos para prevenir futuros episodios.
¿Cómo puedo aliviar, reducir o eliminar las flatulencias de mi perro?
Aunque cierta producción de gases es normal en los perros, el exceso de flatulencias puede resultar incómodo y embarazoso. Lo primero que debes hacer es llamar a tu veterinario, ya que este trastorno puede ser síntoma de alguna enfermedad importante.
Además, existen varias medidas que pueden adoptarse para aliviar y eliminar los gases de tu perro. Algunos de los métodos más eficaces son:
Ajustar la dieta. El primer paso para aliviar los gases en los perros es examinar detenidamente su dieta. Si sospechas que un alimento concreto está causando el problema, intenta eliminarlo de su dieta durante unos días y comprueba si los gases mejoran. Además, considera la posibilidad de cambiar a un alimento para perros de alta calidad que esté diseñado para ser fácilmente digerible.
Evita darle restos de tu comida. Muchos alimentos humanos no son fáciles de digerir para él, sobre todo los que tienen alto contenido en grasa, azúcar o sal. En su lugar, opta por golosinas saludables elaboradas específicamente para él y que le aporten beneficios nutricionales, como proteína magra o fibra. Además, algunos perros pueden ser intolerantes a la lactosa, lo que significa que no pueden digerir correctamente los productos lácteos. Las verduras cocidas al vapor, como el brócoli, la coliflor y las coles de Bruselas, también pueden contribuir a la producción de gases en los perros.
Horario de alimentación. Los perros que comen demasiado deprisa o que salivan en exceso pueden beneficiarse de un horario de alimentación que incluya raciones más pequeñas y frecuentes. Esto ayudará a reducir la cantidad de aire que tragan mientras comen. Un cuenco especial para obligar a comer más lentamente puede serte útil.
Ejercicio regular. El ejercicio ayudará a tu perro a tener una digestión saludable, disminuyendo la producción de gases. Considera la posibilidad de sacarlo a pasear o a jugar antes o después de las comidas.
Probióticos. Los probióticos son bacterias beneficiosas para la digestión. Consulta a tu veterinario para saber si es recomendable añadir un suplemento probiótico a la dieta de tu perro.
¿Cuál es la mejor dieta para mi perro si tiene flatulencia?
La mejor dieta para un perro con flatulencias dependerá de la causa subyacente de su producción de gases. Si se debe a una intolerancia o alergia a determinados alimentos, es importante identificar y eliminar esos alimentos de su dieta.
No olvides que este artículo es meramente informativo. Es importante que consultes a tu veterinario para determinar la mejor dieta para tu perro, en función de sus necesidades individuales y su estado de salud. Él podría recomendarte una dieta de prescripción formulada específicamente para perros con problemas digestivos o una dieta adaptada a las necesidades únicas de tu perro.
¿Existe algún remedio casero para los gases de mi perro?
Si tu perro tiene flatulencia, hay varios remedios caseros que puedes probar para ayudar a aliviar el problema:
Yogur natural. El yogur tiene probióticos que pueden resultar beneficiosos para tu perro. Sin embargo, si sufre de intolerancia a la lactosa, podría no ser conveniente para él.
Enzimas digestivas. Estas enzimas ayudan a mejorar la digestión y reducen la producción de gases. Puedes comprar suplementos específicos para perros o añadir pequeñas cantidades de piña o papaya a sus comidas.
Jengibre. El jengibre es un antiinflamatorio natural beneficioso para tu perro, que ayudará a reducir la inflamación de su tracto digestivo. Puedes añadir pequeñas cantidades a su comida o darle suplementos de jengibre.
Hinojo. El hinojo puede aliviar los problemas del tracto digestivo y reducir la producción de gases. Puedes añadir pequeñas cantidades de semillas a su comida o darle algún suplemento que lo contenga.
Carbón activado. El carbón activado ayuda a absorber los gases. Se pueden comprar suplementos de carbón activado para perros o añadir una pequeña cantidad de polvo de carbón activado a su comida.
Es muy importante tener en cuenta que, aunque estos remedios caseros pueden ayudar a reducir la producción de gases en los perros, no deben utilizarse como sustitutos de la atención veterinaria. Si la flatulencia de tu perro es persistente o va acompañada de otros síntomas como diarrea, vómitos o pérdida de apetito, acude rápidamente a la consulta, para descartar cualquier problema de salud subyacente.
Conclusiones
Los gases en los perros son un problema común que puede estar causado por diversos factores, como la dieta, las afecciones médicas y la ingestión de aire.
Los gases excesivos en los perros pueden resultar incómodos y embarazosos tanto para ellos como para ti, pero existen varias formas de aliviarlos y eliminarlos.
Ajustar la dieta, el horario de alimentación y la rutina de ejercicios puede ayudar a tu perro a reducir la producción de gases y favorecer una digestión saludable.
Los probióticos también suelen ser eficaces para aliviar los gases de tu perro, pero es importante consultar con tu veterinario antes de administrárselos.
La prevención de los gases de tu perro pasa por introducir cambios sencillos y graduales en su estilo de vida, como elegir la dieta más adecuada para él, alimentarlo en horarios constantes y evitar ciertos alimentos.
Los cuencos de alimentación lenta y las raciones más pequeñas y frecuentes ayudarán a tu perro a ingerir menos aire, reduciendo las flatulencias.
El ejercicio regular puede ayudar a promover una digestión saludable y reducir la producción de gases en los perros.
Existen varios remedios caseros que pueden ayudar a tu perro cuando tiene gases, pero no deben sustituir la atención veterinaria y es recomendable que consultes con él o ella la conveniencia de utilizarlos.
Si tu perro tiene gases crónicos o excesivos es importante que acudas al veterinario, pues podrían ser un síntoma de un problema de salud subyacente.
