El hipotiroidismo es un trastorno endocrino frecuente en los perros, que afecta a la glándula tiroides. Esta glándula está regulada por el hipotálamo y produce hormonas que controlan el metabolismo de las células del cuerpo. Por ello, desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de la salud de tu perro.
Cuando la glándula tiroides es poco activa, no produce suficientes hormonas y el perro sufre hipotiroidismo. Esta situación provoca una amplia gama de problemas de salud, como aumento de peso, letargo, caída del pelo o picores.
Aunque no tiene cura, puedes tomar medidas que mejorarán la calidad de vida de tu perro. Si no se trata, puede ocasionar graves daños orgánicos y complicaciones, por lo que un diagnóstico y tratamiento rápidos son esenciales.
Tabla de contenidos
¿Qué es la glándula tiroides?
La glándula tiroides es un órgano del sistema endocrino, responsable de producir y liberar en el torrente sanguíneo de tu perro hormonas importantes para el metabolismo celular.
Este pequeño órgano, con forma de mariposa, está situado en la región del cuello de los perros, concretamente alrededor de la tráquea, debajo de la laringe, y consta de dos lóbulos conectados por una fina pieza de tejido denominada istmo.
La función principal de la glándula tiroides es producir dos hormonas esenciales:
- tiroxina (T4)
- triyodotironina (T3)
Estas hormonas se sintetizan a partir del yodo, un elemento que los perros obtienen de su dieta. Su producción está regulada por el hipotálamo y la hipófisis, ambos situados en el cerebro. El hipotálamo libera la hormona liberadora de tirotropina (TRH), que a su vez estimula a la hipófisis para que produzca la hormona estimulante del tiroides (TSH). La TSH, a su vez, incita a la glándula tiroides a producir y liberar T4 y T3.
¿Cuál es la función de las hormonas T3 y T4?
Las hormonas T3 y T4 desempeñan un papel vital en el crecimiento, el desarrollo y la salud general de los perros. Sus funciones principales son:
- Regulan el metabolismo de las proteínas, las grasas y los carbohidratos, garantizando que el organismo disponga de un suministro constante de energía para realizar las funciones esenciales.
- Son cruciales para el desarrollo del sistema nervioso, el crecimiento óseo y el mantenimiento de una piel y un pelo sanos.
- Regulan la temperatura corporal, la frecuencia cardíaca y la presión arterial del perro.
- Ayudan a mantener el equilibrio entre el gasto energético y la ingesta de energía, garantizando que no sufran sobrepeso ni falta de peso.
- Intervienen en el buen funcionamiento del sistema inmunitario, ayudando al organismo a combatir las infecciones y a mantener la salud general.
- Son muy importantes para mantener los niveles normales de energía en los perros.
¿Por qué mi perro tiene hipotiroidismo?
El hipotiroidismo en perros está causado principalmente por la destrucción o el daño del tejido de la glándula tiroides, lo que conduce a una reducción de la producción de hormonas T3 y T4. Este daño puede ocurrir debido a varias razones:
Tiroiditis linfocítica
También conocida como tiroiditis autoinmune, es la causa más común de hipotiroidismo y se caracteriza por la infiltración de la glándula tiroides por células inmunes, específicamente linfocitos.
Esta respuesta inmunitaria provoca la destrucción del tejido de la glándula tiroides, lo que conlleva una disminución de la producción de hormonas tiroideas, que son esenciales para regular diversos procesos metabólicos del organismo.
Aunque la causa exacta de la tiroiditis linfocítica sigue sin estar clara, se cree que implica una predisposición genética, factores ambientales y una disfunción del sistema inmunitario. Los factores ambientales, como la exposición a toxinas, infecciones o estrés, también pueden contribuir al desarrollo de la tiroiditis linfocítica, al desencadenar una respuesta inmunitaria.
Atrofia idiopática
La Atrofia Idiopática es una condición médica cuya causa exacta se desconoce. Cuando un perro la desarrolla, el tejido sano de su glándula tiroides es sustituido por tejido adiposo o graso, y como resultado, la funcionalidad general de la glándula se ve comprometida, lo que lleva a una disminución en la producción de hormonas y, por tanto, hipotiroidismo.
Como consecuencia, el organismo del perro luchará por mantener su tasa metabólica normal, y el animal puede empezar a mostrar una serie de síntomas, como letargo, aumento de peso, pérdida de pelo e intolerancia a las bajas temperaturas.
Deficiencia de yodo
La insuficiencia de yodo en la dieta del perro puede afectar a la producción de hormonas tiroideas, causando una amplia gama de síntomas, como letargo, aumento de peso, pérdida de pelo, piel seca e intolerancia al frío. En casos graves, también puede dar lugar a problemas de salud más graves, como enfermedades cardíacas y anomalías reproductivas.
Hipotiroidismo congénito
Algunos cachorros nacen con una glándula tiroides subdesarrollada o ausente. No se conoce la causa exacta, pero se cree que se trata de un trastorno genético que se transmite de generación en generación.
En algunos casos, la afección puede ser el resultado de una enfermedad autoinmune, en la que el sistema inmunitario del cachorro ataca a su propia glándula tiroides, lo que provoca su subdesarrollo o ausencia.
Además, los factores ambientales, como la exposición a determinadas toxinas o medicamentos durante el embarazo, también pueden contribuir al desarrollo de este trastorno en los cachorros.
Medicamentos
Ciertos medicamentos, como los esteroides o los anticonvulsivos, también pueden causar hipotiroidismo en los perros. Por ello, es preciso vigilar a los perros en tratamiento a largo plazo con esteroides o anticonvulsivos, para detectar signos de hipotiroidismo y ajustar su plan de tratamiento.
¿Cuáles son los principales síntomas de hipotiroidismo en los perros?
Cuando el ritmo metabólico disminuye, prácticamente todos los órganos del cuerpo se ven afectados. La mayoría de los perros con hipotiroidismo presentan uno o más de los siguientes síntomas:
- Aumento de peso sin incremento del apetito
- Letargo y apatía
- Intolerancia al frío
- Pelo seco y sin brillo
- Muda excesiva
- Pelo muy fino y zonas sin pelo
- Aumento de la pigmentación oscura de la piel
- Infecciones cutáneas
- Infecciones del oído
- Anemia
- Estreñimiento
- Frecuencia cardíaca lenta
En algunas ocasiones se presentan también otras señales, como:
- Engrosamiento de la piel facial, por lo que el perro tiene una expresión trágica
- Funcionamiento anormal de los nervios, que provoca cojera no dolorosa, arrastre de los pies, falta de coordinación e inclinación de la cabeza
- Pérdida de libido e infertilidad en machos intactos
- Falta de celo, infertilidad y abortos en las hembras
- Depósitos de grasa en las córneas
- Queratoconjuntivitis seca, debido a la falta de producción de lágrimas
¿Cómo se diagnostica el hipotiroidismo en los perros?
Si sospechas que tu perro puede tener hipotiroidismo, es importante que acudas al veterinario.
En primer lugar, el veterinario realizará un examen físico completo de tu perro, que incluye la palpación de los ganglios linfáticos, la evaluación del pelaje y la piel, el examen de los ojos y los oídos, y la evaluación de su estado general. El veterinario también puede preguntar por el historial médico del perro, incluidas enfermedades previas, medicaciones y vacunas.
Además de la evaluación física, el veterinario realizará un análisis de sangre para evaluar los niveles de las hormonas T3 y T4 en el organismo del perro. Estas pruebas son necesarias, ya que proporcionan una medición precisa de la función tiroidea, que es esencial para el diagnóstico de hipotiroidismo.
Los análisis de sangre pueden incluir un recuento sanguíneo completo, un panel de química sanguínea y pruebas de hormonas tiroideas.
El recuento sanguíneo completo evalúa la salud general del perro, mediante la evaluación de los glóbulos rojos y blancos, las plaquetas y los niveles de hemoglobina. El análisis bioquímico de la sangre mide varias enzimas, proteínas y electrolitos, lo que puede ayudar a identificar cualquier problema de salud subyacente que pueda estar causando o contribuyendo a los síntomas. El análisis de las hormonas tiroideas incluye la medición de los niveles de las hormonas T3 y T4, así como de la hormona estimulante del tiroides (TSH) en sangre.
Un nivel bajo de hormonas T3 y T4, junto con un nivel elevado de TSH, suele indicar hipotiroidismo.
Cómo se trata el hipotiroidismo en los perros
- El hipotiroidismo no tiene cura, aunque sí puede tratarse, mediante terapia hormonal sustitutiva con hormonas tiroideas sintéticas, como la levotiroxina, ya que esta hormona es químicamente idéntica a la T4 natural.
- Determinar la dosis y duración adecuadas del tratamiento con levotiroxina es un aspecto crítico del tratamiento del hipotiroidismo en perros. Hay varios factores que influyen en estas decisiones, como la edad, el peso, la raza, el estado general de salud y la gravedad de la enfermedad.
- En general, la dosis de levotiroxina se calcula en función del peso del perro y suele administrarse por vía oral una o dos veces al día.
- El control regular y las visitas de seguimiento al veterinario son componentes cruciales del proceso de tratamiento del hipotiroidismo en perros. Dado que el objetivo de la terapia hormonal sustitutiva es mantener los niveles de hormonas tiroideas del perro dentro de un rango normal, es esencial asegurarse de que la dosis prescrita de levotiroxina es eficaz y bien tolerada por el perro.
- Por ello, el veterinario realizará análisis de sangre periódicos, para verificar que los niveles de hormona tiroidea son normales. La muestra de sangre suele tomarse justo antes o entre 4 y 6 horas después de la administración de la medicación, ya que los niveles hormonales pueden fluctuar.
- Dado que la tolerancia del perro a la hormona tiroidea sustitutiva puede cambiar con el tiempo, puede ser necesario ajustar periódicamente la dosis. Por lo general, es necesario volver a analizar los niveles de hormona tiroidea cada seis meses.
- Si el perro toma una cantidad excesiva del medicamento, pueden aparecer signos de hipertiroidismo, entre los que se incluyen hiperactividad, falta de sueño, pérdida de peso y sed.
- Las visitas periódicas de control y seguimiento al veterinario son cruciales para garantizar el ajuste adecuado de la dosis y evaluar la eficacia del tratamiento.
- Este tratamiento se prolongará durante toda la vida del perro, pero siguiendo las instrucciones del veterinario, podrá llevar una vida sana y feliz.
¿Qué puedo hacer para prevenir el hipotiroidismo de mi perro?
Aunque no podrás prevenir el hipotiroidismo de tu perro, sí puedes tomar medidas que favorezcan su salud general y que te permitan detectar posibles problemas antes de que se agraven, como:
Proporciona a tu perro una dieta equilibrada
Una dieta equilibrada desempeña un papel crucial en el bienestar general del perro y puede influir significativamente en su función tiroidea. La glándula tiroides requiere nutrientes específicos para funcionar de forma óptima, y el yodo es uno de los elementos esenciales necesarios para sintetizar las hormonas tiroideas.
Una ingesta inadecuada de yodo puede provocar una disfunción tiroidea y causar hipotiroidismo. Por otra parte, un exceso de yodo también puede ser perjudicial para la glándula tiroides, provocando fluctuaciones en la producción de hormonas.
Por lo tanto, es esencial proporcionar una dieta con niveles adecuados de yodo para favorecer la función tiroidea y la salud general de los perros.
Los alimentos comerciales para perros suelen estar formulados para satisfacer sus necesidades nutricionales específicas, incluidos los niveles adecuados de yodo. Sin embargo, no todos los alimentos para perros son iguales, y algunos pueden no contener cantidades suficientes de este nutriente vital. Consulta a tu veterinario sobre la dieta más adecuada para tu perro. Es posible que tu veterinario te recomiende también algún suplemento dietético para garantizar que tu perro reciba la cantidad de yodo adecuada.
Acude a revisiones veterinarias periódicas
Estas visitas al veterinario son esenciales para detectar precozmente cualquier anomalía o cambio en la salud del perro, que pueda indicar un problema tiroideo. Si a tu perro se le diagnostica hipotiroidismo, la intervención precoz es crucial para controlar la enfermedad y prevenir complicaciones posteriores.
Mantén la salud general de tu perro
Esto puede incluye el control del peso, el ejercicio y los hábitos dietéticos, ya que la obesidad y un estilo de vida sedentario pueden contribuir a la disfunción tiroidea. El ejercicio regular no sólo favorece un peso saludable, sino que también promueve una función metabólica óptima, que es esencial para la salud de la tiroides.
¿Hay razas de perros más propensas que otras a sufrir hipotiroidismo?
El hipotiroidismo suele afectar a perros de mediana y avanzada edad, siendo más predispuestas ciertas razas como:
- Boxer
- Cocker Spaniel
- Dachshund
- Doberman Pinscher
- Gran Danés
- Golden Retriever
- Schauzer Miniatura
- Setter Irlandés
Conclusiones
- El hipotiroidismo es un trastorno endocrino común en perros, que afecta a la capacidad de la glándula tiroides para producir suficientes hormonas para las funciones corporales normales.
- La causa más común de hipotiroidismo canino es la tiroiditis linfocítica, una enfermedad autoinmune que conduce a la destrucción del tejido tiroideo.
- Otras causas incluyen defectos congénitos, deficiencia de yodo y ciertos medicamentos que afectan a la función tiroidea
- Aunque puede afectar a cualquier perro, el hipotiroidismo se presenta con más frecuencia en algunas razas.
- Presta atención a los síntomas y acude a tu veterinario si crees que tu perro puede tener hipotiroidismo.
- Con el tratamiento y la gestión adecuados, los perros con hipotiroidismo pueden llevar una vida sana y feliz con un buen pronóstico de salud a largo plazo.