Es probable que te asustes si ves sangre en el vómito de tu perro y, de hecho, se trata de algo importante. Si esto sucede, mantén la calma y llama al veterinario, porque la atención inmediata puede conducir a un mejor pronóstico.
Los vómitos son frecuentes en los perros y la presencia de sangre en ellos puede indicar la existencia de una hemorragia en algún punto entre la boca y el inicio del intestino delgado.
Las causas más frecuentes del vómito con sangre son las úlceras gástricas y duodenales, la presencia de cuerpos extraños en el tracto gastrointestinal y los tumores gástricos.
Tabla de contenidos
Qué es la Hematemesis y cómo es la sangre del vómito de mi perro
Se denomina Hematemesis al vómito de sangre procedente del tubo digestivo alto (esófago, estómago o primera parte del intestino delgado).
Es posible que esta sangre proceda de una hemorragia nasal o de heridas en la boca, pero también puede deberse a una irritación o inflamación en el estómago o los intestinos o a alguna otra causa que reviste gravedad, por eso es muy importante que acudas al veterinario.
Dependiendo de dónde se origine la hemorragia, los episodios pueden incluir sangre roja fresca y brillante o sangre parcialmente digerida, más oscura y con el aspecto de posos de café.
En general, cuanto más oscura es la sangre, más urgente es acudir al veterinario, porque indica que la hemorragia se está produciendo desde hace algún tiempo, es decir, no se trata de algo reciente. Sin embargo, el hecho de que la sangre sea roja y brillante no quiere decir que no pueda ser grave.
Algunos de los síntomas asociados a la hematemesis son:
- Anemia
- Soplo cardíaco
- Debilidad que puede llevar al perro al colapso
- Arritmia o pulso acelerado
- Heces oscuras o de aspecto alquitranado (melena), que pueden ser un síntoma de hemorragia intestinal
De dónde procede la sangre del vómito
La sangre puede proceder del estómago, del esófago (tubo entre la boca y el estómago) o de la parte superior del intestino (la parte del tracto intestinal conectada al estómago). Las hemorragias pueden deberse a cualquier cosa que provoque una lesión, irritación o inflamación del revestimiento de estos órganos.
En algunas ocasiones, una hemorragia grave en la boca o en las vías respiratorias puede hacer que el perro trague sangre y luego la vomite. En este caso, no suele ser preocupante, pero es imprescindible que sea el veterinario quien determine la gravedad.
Qué puede provocar el vómito con sangre en mi perro
Las causas más frecuentes de la aparición de sangre en el vómito de tu perro son las siguientes:
- Vómitos prolongados que acaban por inflamar el estómago, la parte superior del intestino o el esófago, provocando la hemorragia.
- Síndrome de vómitos biliosos. Una acumulación de bilis amarilla o verde puede irritar el tracto gastrointestinal del perro y provocar motas de sangre en su vómito. El veterinario recetará algún medicamento que proteja el revestimiento del estómago o algo que mejore la digestión del perro.
- Enfermedad inflamatoria intestinal, donde la inflamación del aparato digestivo, como consecuencia de una lesión, infección o irritación. Es parecida a la úlcera de estómago, ya que también se produce un exceso de ácido estomacal erosiona el revestimiento gastrointestinal del estómago y provoca un dolor intenso, inflamación e hinchazón. También es posible que su perro tenga una enfermedad preexistente que le provoque vómitos con sangre. El veterinario te recetará algún antiinflamatorio.
- Obstrucción del tracto digestivo por la presencia de un cuerpo extraño. Si tu perro se está atragantando, trata de retirar el objeto de la garganta o intentar la maniobra de Heimlich para perros. Llama a tu veterinario antes de provocar el vómito. La extracción del objeto extraño requiere cirugía gastrointestinal.
- Ingestión de un objeto afilado, como un palo o una astilla de hueso, que puede perforar el estómago o los intestinos.
- Gastroenteritis hemorrágica. La causa es la acumulación de bilis y mucosidad, que altera el revestimiento intestinal. Antes de llevarlo al veterinario, trata de hidratar a tu perro, ya que habrá perdido una gran cantidad de agua.
- Úlcera estomacal, que puede estar causada por enfermedades digestivas, renales, insuficiencia hepática o como efecto secundario de algunos medicamentos. Cuando esto sucede, se produce una cantidad excesiva de ácido estomacal que erosiona el revestimiento gastrointestinal del estómago. Esto puede provocar una diarrea sanguinolenta grave o una hematemesis con aspecto de posos de café oscuros, que es un signo de sangre digerida. La solución veterinaria consiste en la prescripción de una medicación eficaz para reducir el ácido del estómago y el tratamiento de las úlceras.
- Alergia alimentaria. Las alergias pueden causar diarrea con sangre, dolor abdominal y vómito con sangre en situaciones extremas. El veterinario diagnostica la alergia por medio de un análisis de piel, saliva o sangre.
- Parásitos intestinales, como la Giardia, los anquilostomas y los gusanos del corazón, que pueden adherirse al revestimiento intestinal del perro e ingerir sus nutrientes. Una cantidad importante de parásitos puede provocar vómitos con sangre.
- Infecciones virales o bacterianas. Es posible que el perro necesite hospitalización y tratamiento agresivo, con terapia de fluidos para la deshidratación, antieméticos para los vómitos y transfusión de sangre para la hemorragia. También es probable que tu veterinario te recete antibióticos.
- Ingestión de algún producto tóxico. Para evitarlo, asegúrate de que tu perro no tiene acceso a plantas venenosas, productos químicos o alimentos nocivos para él.
- Problemas de coagulación de la sangre. Puede tratarse de una enfermedad preexistente que provoca hemorragias internas y vómitos de sangre al perro. La insuficiencia hepática, el cáncer y la ingestión de toxinas pueden causar la capacidad de coagulación de la sangre del perro. Los coágulos de sangre pueden causar un fuerte dolor abdominal y grandes cantidades de sangre vomitada. No hay tratamiento específico y es probable que tu perro requiera transfusiones de sangre o plaquetas.
- Lesión traumática, que provoca el sangrado de algún órgano interno del perro.
- Cáncer. Si tu perro tiene un cáncer de estómago o de esófago, puede presentar vómitos con sangre, pérdida de peso y diarrea. La solución pasa por la extirpación quirúrgica, la radiación y la quimioterapia.
¿Es grave que mi perro vomite sangre?
El vómito de sangre indica con frecuencia la existencia de hemorragias internas graves, por eso es tan importante que llames a tu veterinario.
Aunque se trate de una pequeña mancha de sangre y tu perro no presente ningún otro síntoma, es conveniente que te pongas en contacto con él para determinar la causa. Es especialmente preocupante cuando:
- Hay una gran cantidad de sangre en el vómito.
- También aparece sangre en las heces o diarrea.
- Tu perro es un cachorro. Ten en cuenta que los cachorros son propensos a las infecciones y que estas pueden agravarse e incluso ser mortales.
- Tu perro presenta otros síntomas, como fiebre, desgana, diarrea, pérdida de apetito, incapacidad para retener la comida y el agua, etc.
Cómo es el vómito con sangre de mi perro
Si cuando llamas a tu veterinario puedes aportar detalles sobre cómo es el vómito de tu perro, le ayudarás a determinar la gravedad del problema.
Si esto sucede, observa el color del vómito:
- ¿Es rojo intenso? En este caso, es probable que tu perro tenga una hemorragia reciente en el esófago o el estómago.
- ¿La sangre es oscura, está coagulada o presenta el aspecto de posos de café? En este caso, se trata de sangre parcialmente digerida y es indicativa de algo que ha estado sangrando durante un tiempo o hace tiempo. Fíjate en si hay cantidades grandes de sangre en el vómito o si solo son unas motas.
- ¿Hay algún objeto extraño en el vómito? Si en el vómito hay trozos de un juguete masticado, pruebas de veneno para ratas (generalmente son como gránulos verdes), etc., coméntaselo a tu veterinario.
Posible causa del problema
Hay muchas razones por las que un perro puede vomitar sangre, pero casi siempre están relacionadas con la irritación o el traumatismo del aparato digestivo superior, incluido el esófago (el conducto que conecta la boca y el estómago) y el estómago. También puede tratarse de hemorragias nasales que drenan hacia la parte posterior de la garganta.
Lesión en la boca
Si ves vómitos con sangre, puede deberse a algo tan simple como unas encías lesionadas. A veces, los perros pueden masticar agresivamente un juguete o un hueso y cortarse las encías, provocando una secreción sanguinolenta de la boca del perro.
Levanta los labios de tu perro y comprueba si hay una lesión bucal. Ten cuidado, porque si el perro sufre dolor, puede morderte o gruñirte. Si tu perro no coopera, lo mejor es que busques la forma de llevarlo al veterinario para que un profesional le examine la boca en busca de signos de traumatismo.
Úlcera estomacal
Las úlceras de estómago se producen cuando un un exceso de ácido estomacal erosiona el revestimiento del estómago. Son dolorosas y pueden ir acompañadas de pérdida de apetito y cansancio excesivo. Los perros con úlcera estomacal suelen vomitar material teñido de rosa, o pueden toser mucosidad con aspecto sanguinolento. También pueden vomitar algo parecido a los posos del café, lo que indica que la úlcera ha estado sangrando durante un tiempo. Las úlceras estomacales también pueden provocar una diarrea oscura y con aspecto de alquitrán. Si observas este tipo de vómito, debe llamar inmediatamente a su veterinario para que examine a su perro.
Condiciones médicas
Hay una serie de condiciones médicas que pueden dar lugar a los vómitos sanguinolentos, como el cáncer asociado al estómago o al esófago. Algunos síntomas asociados son el cansancio excesivo, la pérdida de peso y la pérdida de apetito. Los tumores sangrantes en el esófago o el estómago pueden hacer que el perro sienta náuseas y vomite sangre.
Enfermedad hepática, renal o trastorno autoinmune
El problema también puede estar fuera del sistema digestivo. Los perros que padecen enfermedades hepáticas graves, enfermedades renales o trastornos autoinmunes pueden vomitar material teñido de sangre. Un trastorno de la coagulación también puede dar lugar a vómitos sanguinolentos.
La causa más común de los trastornos de la coagulación en los perros está relacionada con el consumo accidental de veneno para ratas, que interfiere con la vitamina K y provoca una hemorragia excesiva. Otra causa de los trastornos de la coagulación en los perros es una enfermedad hepática. En cualquiera de los casos, es preciso acudir al veterinario.
Parásitos o cuerpos extraños
Si tu perro ha comido algo que no debía, podría estar irritando u obstruyendo el tracto digestivo, lo que puede dar lugar a vómitos con sangre.
Los parásitos intestinales, incluidos los anquilostomas y los ascárides, provocan vómitos con sangre en los perros. En particular, los anquilostomas pueden ser especialmente perjudiciales para el revestimiento del tracto intestinal.
Afortunadamente, puedes proteger a tu perro de la mayoría de los parásitos intestinales con un simple desparasitante mensual de amplio espectro de tu veterinario.
Qué puede hacer el veterinario si mi perro vomita sangre
A veces, un perro que tose con esputo sanguinolento por los pulmones o la tráquea puede confundirse con un vómito de sangre. Hay muchas razones por las que un perro puede toser con secreciones sanguinolentas y que pueden ser graves, como la insuficiencia cardíaca congestiva y la enfermedad del gusano del corazón. Por eso, si ves que tu perro tose algo de color rosa, rojo o que parece poso de café, es preciso acudir al veterinario.
Si puedes llevar una muestra del vómito, ayudarás a establecer un diagnóstico preciso y rápido.
En la consulta, el veterinario examinará a tu perro y determinará si es necesario realizar alguna prueba, como radiografías o análisis de sangre. El tratamiento depende de la causa subyacente.
Tratamiento de un perro que vomita sangre
Dependiendo de las necesidades de tu perro, es posible que tu veterinario le recete algunos medicamentos para que se sienta mejor y frenar la hemorragia y los vómitos. Entre estos medicamentos se encuentran:
- Antiácidos
- Protectores de la mucosa del estómago
- Medicación contra las náuseas
- Terapia de fluidos para evitar la deshidratación y recuperar el equilibrio electrolítico
- Dieta blanda, como pollo y arroz hervido, o un alimento específico para estómagos sensibles
- En caso grave, el veterinario puede llevar a cabo una transfusión de sangre, pero esto es solo si la pérdida de sangre es severa.
Diagnóstico para el vómito de sangre de tu perro
Además, tu veterinario tratará de localizar la causa subyacente y establecer un diagnóstico que le permita llevar a cabo las acciones necesarias. Para ello, es probable que lleve a cabo pruebas como las que indicamos a continuación:
- Control fecal para detectar parásitos
- Análisis de sangre y orina
- Pruebas de coagulación de la sangre
- Pruebas de enfermedades infecciosas
- Radiografías
- Ecografía
- Cirugía exploratoria
- Biopsia
- Otras pruebas
Después de un examen físico para comprobar si hay dolor abdominal y otros problemas y las pruebas de diagnóstico, un veterinario puede comenzar el tratamiento que está dirigido a curar o gestionar cualquier enfermedad subyacente.
Por ejemplo, un perro con lombrices intestinales recibirá un tratamiento antiparasitario, y un perro con una obstrucción intestinal probablemente necesitará una intervención quirúrgica.
Dependiendo de la gravedad de la enfermedad de un perro, puede ser enviado a casa con medicamentos orales, o puede necesitar ser hospitalizado durante algún tiempo.
¿Cómo puedo prevenir el vómito de sangre en mi perro?
Desafortunadamente, algunas de las causas que provocan el vómito de sangre a tu perro no pueden prevenirse. Sin embargo, en otros casos sí puedes establecer una serie de pautas que minimicen el riesgo, como:
- Mantén a tu perro al día con las vacunas y visitas al veterinario
- Trata de prevenir la aparición de parásitos
- Evita el acceso a productos tóxicos y a ciertas plantas y flores
- Alimenta a tu perro de forma sana y equilibrada
Conclusiones
- El vómito de sangre puede ser grave y suele indicar hemorragias en el tracto digestivo alto.
- Es importante que te fijes en el vómito y apuntes todos los detalles posibles para comentárselos al veterinario
- Si puedes, lleva una muestra del vómito a la consulta
- Si la sangre es oscura, es urgente llamar al veterinario, pues indica una hemorragia que lleva tiempo produciéndose
- Presta atención a otros posibles síntomas del perro
- Asegúrate de que tu perro permanece alejado de productos tóxicos para él
- Ten cuidado con los juguetes, objetos punzantes y cuerpos extraños