Mi perro respira corto y muy rápido. ¿Es normal?

¿Sabías que, cuando está en reposo, un perro sano realiza entre 15 y 35 respiraciones por minuto ?

Por ello, si tu perro hace más de 35-40 respiraciones por minuto, es recomendable que acudas al veterinario, pues puede ser un síntoma de alguna enfermedad o dolencia.

Sin embargo, el hecho de que tu perro jadee o respire rápidamente no siempre es síntoma de que algo va mal. Por ejemplo, cuando hace mucho calor o después de correr, es normal que el perro jadee, pues es su manera de regular la temperatura corporal. Como no suda como nosotros, las respiraciones rápidas permiten que el oxígeno circule eficazmente por el sistema respiratorio.

En este artículo analizaremos las diferentes causas por las que un perro puede respirar corto y rápido, para que aprendas a determinar cuando es recomendable llamar al veterinario.

¿Debo acudir al veterinario si mi perro jadea y respira rápido?

La respiración rápida en los perros puede deberse simplemente a la excitación o al ejercicio. Además, pueden jadear cuando tienen miedo, estrés o calor. El jadeo es una de las formas más importantes de termorregulación del perro y puede ser perfectamente normal.

Sin embargo, también puede ser el síntoma de alguna enfermedad o dolencia, por lo que es importante que la vigiles y llames a tu veterinario en caso de duda.

¿Cuándo puedo decir que un perro hace respiraciones demasiado rápidas?

La respiración normal de un perro implica tomar aire entre 15 y 35 veces por minuto. Por eso, todo lo que se encuentre por debajo de 30 respiraciones por minuto se considera normal y todo lo que esté por encima de 35 es motivo de preocupación.

En general, es recomendable que acudas al veterinario si tu perro tiene más de 30 respiraciones por minuto cuando está en reposo.

Para medir las respiraciones por minuto que hace tu perro, asegúrate de que está en reposo, pues, como decíamos, después de hacer ejercicio es normal que respire rápidamente.

De hecho, al hacer ejercicio, la frecuencia de las respiraciones puede aumentar hasta 10 veces, es decir, tu perro puede llegar a realizar entre 100 y 350 respiraciones por minuto.

Otros síntomas que indican que mi perro no respira de manera normal

Además del número de respiraciones por minuto, debes atender a otros síntomas que indican que tu perro puede tener problemas respiratorios y requerir atención veterinaria:

  • Hace ruidos anormales al respirar, como gruñidos, silbidos o sonidos ásperos.
  • Jadea sin motivo aparente (está relajado, no viene de hacer ejercicio, no hace demasiado calor, no está tumbado al sol).
  • Respira rápido, con la boca ligeramente abierta y sin sacar la lengua.
  • Babea más de lo habitual.
  • Empuja con el abdomen para que el aire entre o salga.
  • La respiración es rápida y superficial o demasiado lenta y profunda.
  • Sus encías o su lengua están azuladas o moradas.
  • Respira fuerte o rápido mientras está de pie y no quiere descansar ni tumbarse durante mucho tiempo.
  • Parece que le cuesta recuperar el aliento o se muestra angustiado.
  • El perro se niega a beber, comer o moverse.
  • El perro tiene una respiración pesada y rápida que suena diferente a su jadeo habitual.

Mi perro respira demasiado rápido. ¿Qué le pasa?

La respiración acelerada de tu perro podría ser un síntoma de que sufre alguna enfermedad o afección, así que lo mejor es que te pongas en contacto con tu veterinario para poder hacer un diagnóstico correcto.

Algunas causas potenciales de la respiración acelerada en tu perro a las que debes prestar atención son:

Síndrome braquicefálico

El perro es braquicéfalo y tiene los problemas respiratorios característicos de estas razas. Al tener los hocicos demasiado cortos, sus vías respiratorias son más pequeñas y pueden estar aplastadas. Por ello, tienen más propensión a sufrir este tipo de problemas.

Parálisis laríngea

Cuando los nervios que controlan los músculos de la laringe fallan, las aletas laríngeas no se mueven y se obstruye parcialmente la entrada de la tráquea, llegando menos aire a los pulmones.

Esta parálisis puede producirse por traumatismos en el cuello u otros problemas de salud.

Entre sus síntomas se encuentran la respiración rasposa, aumento del jadeo y respiración ruidosa y aguda, que empeora cuando el perro está excitado. Además, cambia la voz del perro, es decir, el ladrido suena diferente.

Infecciones

Las infecciones bacterianas, víricas o fúngicas que afectan a las vías respiratorias, como la tos de las perreras.

Neumonía

Cuando los alveolos pulmonares no pueden realizar tu trabajo con eficacia, no llega suficiente oxígeno a la sangre y la respiración del perro se acelera o se vuelve dificultosa. Otros dos síntomas comunes de la neumonía son la fiebre y el letargo.

Colapso en la tráquea

Enfermedad de las vías respiratorias inferiores, como la bronquitis o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica. La inflamación provoca el estrechamiento de las vías respiratorias inferiores. Esto hace más difícil que el oxígeno llegue a los pulmones y que el dióxido de carbono salga de ellos.

Como resultado, los perros con enfermedades de las vías respiratorias inferiores pueden toser con frecuencia, mostrar una respiración rápida y pesada y jadear excesivamente.

Líquido en los pulmones

La acumulación excesiva de líquido en los pulmones puede hacer que tu perro respire aceleradamente y también puede ser indicativo de otras enfermedades subyacentes.

Insuficiencia cardíaca

Cuando el corazón del perro empieza a fallar, no circula suficiente oxígeno por su cuerpo y la respiración se acelera para aumentar ese nivel de oxígeno en el sistema circulatorio.

Los perros con insuficiencia cardíaca suelen tener una tos persistente y con frecuencia se niegan a hacer ejercicio físico o se cansan demasiado pronto.

Golpe de calor

Los perros solo tienen glándulas sudoríparas en las patas, por lo que no pueden disipar el calor con mucha eficacia y utilizan la respiración para regular la temperatura.

Cuando se sobrecalientan, respiran rápidamente, para aumentar el flujo de oxígeno y disminuir la temperatura corporal.

Acude rápidamente al veterinario, porque el golpe de calor puede afectar a sus órganos internos y provocarle la muerte. Requiere atención urgente.

Anemia

Un recuento menor de glóbulos rojos (anemia) significa que hay menos oxígeno en circulación, y el cuerpo de su perro puede reaccionar aumentando la respiración. La palidez de las encías, el letargo y la debilidad son otros signos de anemia.

La anemia puede poner en peligro la vida de tu perro, así que es importante que acudas al veterinario.

Dolor

Los jadeos excesivos y la respiración acelerada pueden ser síntomas de que tu perro sufre dolor por algo. Es importante que acudas al veterinario para determinar la causa.

Cáncer

El cáncer en los perros puede afectar a su respiración de diferentes maneras. Si el cáncer es de pulmón, la inflamación y la presión del tumor pueden causar tos y problemas para respirar. El cáncer en otras partes del cuerpo puede hacer metástasis (es decir, extenderse) a los pulmones, lo que también puede hacer que el perro respire más rápidamente.

Además, algunos cánceres pueden provocar la acumulación de líquido en los pulmones (edema pulmonar) o alrededor de los mismos (derrame pleural). El edema pulmonar interfiere en la capacidad del perro para intercambiar dióxido de carbono por oxígeno, y el derrame pleural impide que los pulmones se expandan completamente. Ambas condiciones pueden conducir a un aumento de la frecuencia respiratoria o a cambios en el esfuerzo respiratorio.

Ansiedad

Además de jadear en exceso o respirar rápidamente, los perros ansiosos también pueden bostezar cuando no están cansados, encogerse y temblar, o volverse destructivos o agresivos.

Otras causas

La respiración rápida también puede ser causada por otras afecciones, como asma, intoxicación alimentaria, inhalación de humo, parásitos, hernia, náuseas o por efecto de alguna medicación, entre otras.

¿Qué puede hacer el veterinario si mi perro respira demasiado rápido?

Diagnóstico

El veterinario realizará un examen al perro, para determinar si se trata de un problema del corazón, el sistema circulatorio, los pulmones, las vías respiratorias, el cuello, la cabeza u otra zona.

Comprobará si tu perro puede tener alguna costilla rota, un tumor o algún problema en un órgano.

Es posible que decida realizar alguna radiografía y que busque la presencia de otros factores que puedan conducir a una respiración acelerada, como un tumor, el estrés o la ansiedad.

Tratamiento

El tratamiento depende de la causa subyacente que lleve a tu perro a presentar este tipo de respiración.

Si sufre dolor, le recetará medicamentos para aliviarlo, además de los destinados a eliminar la enfermedad o dolencia que sufre.

Conclusiones

  • Si tu perro realiza más de 35 respiraciones por minuto, es importante que acudas al veterinario.
  • Los jadeos y respiraciones rápidas pueden ser normales, pero también puede tratarse de un síntoma de alguna enfermedad o problema.
  • Cuando un perro hace ejercicio, su respiración puede ser hasta 10 veces más rápida de lo normal.
  • Atiende a los síntomas que pueden indicar que tu perro necesita ayuda veterinaria

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